lunes, 6 de febrero de 2012

Crédito fácil, ¿Una salida a las jaranas o al suicidio económico?


San Pedro Sula.- Hay personas que empeñan “hasta el alma” con tal de salir de las deudas o presumir que tienen solvencia económica. Otras tienen que deshacerse de lo único que poseen para poder sobrevivir, más aún cuando no se cuenta con un empleo.


Isabel, como miles de hondureños, no tiene trabajo y asfixiada por las deudas se vio en la necesidad de empeñar el único bien con que contaba, un vehículo modelo 1997. Ella alquila una casa porque no cuenta con la propia y es madre de tres hijos.
Con el dinero obtenido por el empeño de su carro, que son aproximadamente 50 mil lempiras, la mujer pretende saldar algunos créditos bancarios y refinanciar otros, para tener vida crediticia y no caer en la tenebrosa Central de Riesgos que maneja la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS) o que la anden siguiendo los “cobras” para que cumpla con sus pagos.
Ella tiene la esperanza de encontrar pronto un empleo, porque los intereses van corriendo y si entra en mora le quitarán su automóvil, que con tanto esfuerzo lo había comprado. A la vez ya no tendrá nada de valor para seguir empeñando, porque no tiene ni casa propia para hipotecarla, o sea que será su “suicidio” económico.
Muchas personas se encuentran en la condición de Sonia, desempleados y con numerosas deudas, algunos  tratan de sobrevivir haciendo maniobras con su tarjeta de crédito o empeñando sus bienes; otros han terminado en el hospital psiquiátrico o en la morgue del Ministerio Público porque han perdido la razón y hasta la vida al sufrir un paro cardíaco por las preocupaciones o porque se han quitado la vida.


LOS “CARA DURA”
Según psiquiatras, hay otros pobladores que son “cara dura” o pierden el sentido de la responsabilidad, porque aunque estén sumergidos en problemas económicos o deudas, van adquiriendo créditos a base de mentiras o de la buena fe de los amigos, quienes les prestan dinero o  les sirven como avales y terminan pagando las jaranas de otros.

Sin embargo, también hay ciudadanos muy responsables que cuando solicitan un crédito, aunque no coman, están fielmente pagándolo mes a mes. Estos manejan bien sus cuentas y no caen fácilmente en el consumismo o en la compra de artículos suntuarios, sólo adquieren lo necesario para sobrevivir y esperar tiempos mejores, según indican estudios financieros.
La crisis económica mundial también sacudió a los hondureños; la condición financiera de miles de habitantes es caótica porque muchos han perdido el trabajo debido a los recortes de personal que se han reportado en diferentes empresas.
Aunque se dice que hay suficiente liquidez en los bancos nacionales, las instituciones financieras no le están facilitando un crédito a cualquier solicitante, menos aún cuando no tiene un empleo o medios para que respondan como garantía del monto cedido.
TRAMPA FINANCIERA
No obstante, existen empresas no controladas por la CNBS, que mediante crédito fácil se dedican a ofrecer dinero a quienes lo necesitan, sin exigirles avales o garantías.
El crédito fácil es una trampa, porque aunque se diga que por deudas no hay cárcel, muchos deudores han quedado en la calle de la noche a la mañana, sin saber qué les pasó, porque tal vez han pagado algunos meses las cuotas que le corresponden, pero han entrado en mora y los intereses se les han acumulado.


Otros terminan con los bienes embargados, aunque estos no figuren como garantía  en el contrato firmado con el deudor. De acuerdo al Código Civil y Código de Comercio, existen procedimientos legales que le permiten al acreedor recuperar su capital invertido y uno de ellos es el embargo precautorio, a través de una demanda de pago.
Si bien es cierto en algunos contratos de empréstitos no se solicitan avales o se suscriben hipotecas; al acreedor, o sea al prestamista, le queda la vía civil para reclamar la deuda.
Durante el proceso, el demandante pide el embargo precautorio y como el deudor no cuenta con dinero para responder, se le solicita al juez que le remate los bienes, lo cual le permite al prestamista recuperar el capital prestado y los intereses. Si no se presentan oferentes durante el remate, el demandante pide que el bien le sea entregado íntegramente a él, porque ha incurrido en muchos gastos entre estos, los de honorarios de abogado y peritos.
     
Otro medio de adquirir dinero fácil es el crédito prendario, el cual ha proliferado en varios puntos de la capital y las principales ciudades del país debido a la crisis económica que sufren miles de habitantes; lo desventajoso de este es que si la persona no cumple a mes con el pago de la cuota y los intereses, puede perder el objeto empeñado.
Por ejemplo, en la capital hay casas de empeño que prestan la mitad del dinero que cuesta un vehículo modelo 2000 por determinado tiempo, con una tasa de interés mensual del 10 por ciento, mientras otras sólo dan 20 mil lempiras por un carro viejo. Hay lugares donde aceptan hasta motocicletas.
Pero para que se dé lo anterior, el aspirante al crédito tiene que entregar documento de propiedad, boleta de revisión con el respectivo pago de impuestos, dos recibos de pago de servicios públicos y un croquis de la dirección de su residencia. 
O sea, que hay personas que andan conduciendo carro prestado, porque mientras no paguen el préstamo, sus autos serán propiedad de la casa de empeño.



Introducción
Quiero compartir con el mundo entero mi experiencia (o pesadilla) con las tarjetas de crédito, ya que al parecer no soy la única victima de esta estafa legalizada, sobre todo en Honduras.

Mi pesadilla comienza cuando me deje convencer de adquirir una tarjeta de crédito de Banco Uno (hoy Citibank) donde me hacían cobros excesivos por todo, así que decidí no cancelarla sino pagar el saldo al día para mantenerla en cero.


El saldo por cargos desconocidos
Al mes me llegó un estado de cuenta por L50.00, no especificaba claramente el motivo del cargo, pero igual procedí a pagar el total del monto que decía el estado de cuenta el mismo día que me llegó. Mi sorpresa fue que el siguiente mes me llego nuevamente el estado de cuenta no en cero como yo imaginaba que iba a llegar, sino con otros L50.00 de cargo.
Fui a atención al público de dicho banco para que me dijeran del porque el cargo, ella me dijo "es que eso lo tira el sistema" y le pregunté que pasa sino pago, me dijo "sino paga caerá en mora y deberá pagar intereses, ademas de que se le cancelaría la linea de crédito y aparecería en central de riesgos"

La gran pregunta ¿Puedo yo como analista programador de sistemas crear un sistema que diga que citibank me debe y ellos estar obligados a pagarme? esto haciendo una inversa de lo que Citibank hace y que al parecer no hay autoridad en Honduras que pueda detener estos abusos.

Pague nuevamente los L50.00 y pedí la cancelación de la tarjeta, me dijeron que una semana llegara por el finiquito.
En el transcurso de esa semana me llamo una promotora del banco con mucha aduleza "usted es un cliente importante para nosotros", "hemos visto su historial crediticio que ha sido muy bueno", "lo hemos seleccionado para que este en un staff de los mejores clientes con múltiples beneficios",  "bla bla bla bla bla"

Por último me dijeron que me iban a regresar el dinero que pague de cargos que aún desconozco, que me iban a dar otra tarjeta de crédito que cuando la usara por primera vez al llegar mi estado de cuenta iba ir adjunto a este un cupón con el que podía llenar el tanque de combustible de mi automóvil gratuitamente, mas descuentos en gasolineras y no sé que mas, bla bla bla.

Nunca me llegó el cupón, nunca me devolvieron lo que pague sin saber que pagaba. Cuando fuí a atención al cliente a reclamar me dijeron que la promoción del tanque lleno ya había terminado y que para el saldo que debía estar a mi favor debería de llamar a la promotora que me atendió, la cuál no sabia su nombre (¿cómo averiguarlo?) ni como comunicarme con ella.

Así que me sentí engañado, pero igual seguí usando por necesidad la tarjeta de crédito, la cuál cada mes venia con cargos que yo desconocía y que ninguna de las personas de atención al publico me aclaraba de lo que se trataba.

El arreglo de pago con extrafinanciamiento
Caí en mora y la cuenta se volvió impagable para mi, así que fui al banco donde me pusieron como condición pagar cierta cantidad para llegar a un arreglo de pago. Pague dicha cantidad el que me atendió dijo que me iba a llamar cuando el arreglo estuviera listo para que solo fuera a firmarlo. Nunca llamó.

Al siguiente mes empiezan a llamar por la mora otra vez, le explique como estaba mi situación y que esperaba la llamada para el arreglo de pago. La misma historia, debería pagar la mora para que me hicieran el arreglo de pago. No llamaron y me di a la tarea de llamar, me decían llámeme el martes, llamaba el marte y me decían llámeme el viernes y así la historia hasta que volví a quedar en mora y sin dinero para seguir pagando, ya que las dos primeras veces tuve que pedir prestado para pagar y así llegar al prometido "arreglo de pago".

Cuando llamaron para cobrarme les dije que si no me ayudaban con eso no iba pagar, me dieron un número telefónico para que llamara y que pagara.

Llame a ese número y me atendió una señorita que me dijo que tenia que pagar X cantidad solo por los intereses y que le llamara cuando realizara el pago.

Pague y llame a la señorita y me dijo venga el viernes atrás de Yude Canahuati y pregunte por ... me dio su nombre. Cuando llegue el día indicado y a la hora indicada ella no estaba, tuve que esperar a que viniera y cuando me pasó a su oficina fue como estar en una oficina del gobierno donde nadie le para bola a uno. Empezó a recibir llamadas a su cel. y a decirme que le esperara, bueno se entiende cuando es una llamada importante o de emergencia, pero ella en su platica empezó a hablar de la universidad, de una fiesta donde al parecer se desveló, de una fulanita que creen está embarazada, bla bla bla, cualquier platica menos de trabajo. Recibió como 10 llamadas a dicho celular y mensajitos de texto los cuales se tomaba el tiempo para contestarlos. Ya en su "tiempo libre" se puso a trabajar y me dijo que iba a iniciar el tramite me hablo de las condiciones de pago y que me volvería a llamar para que fuera a firmar cuando el arreglo estuviera listo.
Nunca llamó, pero me volvieron llamar para cobrarme, fui donde la señorita de los arreglos y me dijo que tenía que pagar y que me prometía que en esa misma semana tendría listo el arreglo de pago con extrafinanciamiento.

Pague y fui el día que ella me señalo y por fin, un arreglo de pago que siempre seguía impagable, porque era la misma cuota que estaba pagando sin tener el arreglo y el financiamiento era para 5 años.


Cancelación total de la deuda
La deuda era para terminar de pagar en enero de 2013, pero con mis ahorros y un esfuercito extra pude juntar una importante cantidad de dinero que sería mas que suficiente para olvidarme de este banco.
Pase a atención al publico para que me dijeran cuanto tenía que pagar para cancelar el total de la deuda y me dijo que tenía que llamar desde las cabinas telefónicas que están en la sucursal al depto. de cobros para que me dieran el saldo, luego pasaría a atención a publico nuevamente para finiquitar la cuenta, esto fue el día sábado 21 de enero de 2011 a las 10:30:57 am en la agencia que está en Megaplaza SPS.

Después de que me dieron el total a pagar que era de Lps.18,423.00 pase a atención al publico, me dicen que todavía tengo un saldo de mora que vuelva a llamar a cobros. Y así lo hice, la srta. se disculpó y me dijo que tenía que pagar Lps. 3,435.00 mas ya para ese entonces ya llevaba como 2 horas y media en el banco tratando de cancelar la cuenta, bueno andaba esa cantidad de dinero, así que pague.
Volví a pasar con con atención al publico y me dijo que llamara a cobros nuevamente, lo hice y me dijo la srta. que le llamara el martes de la siguiente semana o sea el 24/02/2012 de las 11:00 am hasta las 6:00 pm

Llamé a cobros la fecha y hora señalada, me dijo la srta. que el saldo se lo habían cargado a la tarjeta y no al extrafinanciamiento que yo debí especificarle al cajero (ahora resulta que debí ser adivino porque nadie me le dijo) que era un extrafinanciamiento que estaba cancelando. La solución es sencilla me dijo, vaya nuevamente a la agencia y dígale al cajero que dicha cantidad se la pase al extrafinanciamiento. No quiero ser irrespetuoso con la gente que trabaja en dicho banco, ellos son asalariados al igual que yo, pero a veces no se que en pensar, ¿cómo es posible que el cajero pensara que estaba pagando la tarjeta cuando la tarjeta que le di es vieja y venció hace 4 años?

Tuve que volver al banco, me atendió el mismo cajero le explique lo que me dijo la muchacha de cobros, me dijo que tenía que pasara a atención al cliente, lo hice y la srta que me atendió me mando para caja nuevamente con procedimientos escritos en un papel para que lo hiciera el cajero. Me volvió a atender el mismo muchacho el cuál no podía hacer lo que decía en el papel porque necesitaba una autorización de no se quien, llego el no se quien, autorizó y me pregunta que que es lo va a hacer. Dios santo, si él no lo sabe quien? me pregunté, le volví a explicar lo que me dijo la muchacha de cobros y por razones que no entiendo el sistema no dejaba hacer lo que tenía que hacer, así que volví a atención al publico, la cuál me dejo esperando porque ya era su hora de almuerzo. Como no podía seguir esperándola llame a las de cobros que por cierto está en Tegucigalpa, así que ya se imaginan como me va a salir la cuenta telefónica. Me dijo la srta. que le llamara ell miercoles de la misma semana que ella lo iba a arreglar, esto sería el 25/01/2012.

Llame y me dijo que no podía hacer nada porque la tarjeta había hecho cierre el 25 de enero y que ya había un cargo que yo tenia que pagar. El monto esta vez fue de 444.12 (insteres que no se de que si yo ya había pagado el total), pague día 26/01/2012 a las 5:26 pm y le dije al cajero que era para cancelación de extrafinanciamiento. Me volví a comunicar con la de cobros y me dijo "llámeme mañana para pasar lo de su cancelación, para que después le hagan el finiquito" esto sería el 27/01/2012
La llamé la fecha señalada para "recordarle" y me dijo que le llamara el viernes 02/02/2012, la llame y me dijo que la cancelación ya estaba, que tenía que ir a atención al cliente para que ya me dieran el finiquito.

Fui HOY lunes 06/02/2012 a las 11:45 am, pase a atención al publico y me dijo la srta. que no podía hacerme el finiquito porque aparecía un saldo pendiente todavía en la cuenta, que llamara a cobros para que me borraran el saldo,  llame a la de cobros en Tegucigalpa y me dijo de que a ella le aparecía en el sistema de que ya estaba cancelado que le preguntara a la de atención al publico que cantidad era la que aparecía, no le pude preguntar porque se fue a almorzar.

Mañana 07/02/2012 iré nuevamente a la misma agencia a ver si puedo hayar a la de atención al publico y decirme cuanto es lo que le aparece, así que pendientes, mañana postearé lo que suceda.
Cabe señalar que el objetivo de mi blog no es desprestigiar al banco (creo que él solo lo hace no necesita ayuda) o al personal de caja, atención al publico y cobros, sino el de hacer conocimiento al que no tiene tarjeta de crédito para que NUNCA solicite una y para el que la tiene OJALA no pase por lo que yo he pasado.
Acepto comentarios o si alguien a pasado por esto también que nos cuente brevemente su experiencia.